El Gobierno ha anulado la suspensión de las obras en viviendas habitadas que se decretó el 12 de abril para evitar el riesgo de contagio por COVID-19 en edificios residenciales habitados. Desde este lunes e independientemente de la fase en la que se encuentre el territorio, podrán reanudarse las reformas, eso sí, garantizando las medidas de higiene y la distancia social de dos metros interpersonal.